sábado, 28 de abril de 2012

CINE

September


Este mes hago entrega de mi tercera película con una crítica superficial de la excelente película September (1987) del director Woody Allen.
 Recordamos que mis tres películas favoritas que vi en mi vida de cinéfilo: Un tranvía llamado Deseo, de Elia Kazan; Gritos y susurros, de Ingmar Bergman y ésta que presento, todas, repito, reflejan, al menos para mí, la más pura esencia de hacer buen cine.


September, es la mejor película de Woody Allen a pesar que algunos críticos digan que es Annie Hall.
Con September el cine de W. Allen refleja esa sutil influencia de Bergman aunque con ese matiz característico del buen cine de la Costa Este americana. Es una película europea con una perspectiva americana o una película americana con un sabor acusado europeo.


"En una residencia de campo varios personajes desnudan sus verdades, sus desengaños amorosos, sus mentiras y sus frustraciones días antes de finalizar las vacaciones de verano y ya próximo el mes de septiembre.
W. Allen rodó la película en el interior de una casa pero sin sensación de agobio y nos muestra un drama casi de corte teatral pero con unas secuencias lentas que nos hace disfrutar de una bella fotografía con tonos pasteles, sienas y anaranjados (Carlo Di Palma) y con esa  exquisita banda sonora de música de jazz que junto a un elenco de actrices y actores sublimes (Mia farrow, Dianna West, Sam Waterston...) produce una verdadera obra de arte cinematográfica."


Hay algunas escenas irrepetibles:


Diane es una antigua y vitalista actriz de unos 60 y pico años de edad que le dice a su hija depresiva: "Hija ten en cuenta una cosa, unos luchan por la vida y otros se abaten. Si te ha ido mal en la vida no me culpes, cúlpate tú".


En otra escena esta madura señora de rompe y rasga se dice al mirarse a un espejo: "Envejecer es un tormento y sobre todo cuando se siente una por dentro como si tuviera 20 años"


Pero la escena que más me gustó de esta magnífica película es cuando se va la luz de la casa a causa de una tormenta y encienden una vela: silencio... hasta que alguien se sienta frente a un piano y comienza a tocar. Entonces la cámara hace un lento travelling por la habitación para mostrarnos imágenes bajo una luz suave y muy contrastadas, con unos claros y oscuros que hacen recordar algunas pinturas de Teniers. 



Nortes y Sures

Puede servir de introducción a este artículo la simpática película italiana "Benvenuti al Sud" del director Luca Minero.
Un empleado de una caja postal que vive y trabaja en el próspero norte de Italia comete una falta laboral y el departamento de recursos humanos lo castiga enviándolo al Sur, a la Campania. Una región con mala fama debido a que sus habitantes son unos folloneros, juerguistas, fulleros, flojos e indolentes. Los tópicos que todas las regiones sureñas de occidente "disfrutamos" Arizona, Nuevo Mexico y Texas en los Estados Unidos; Extremadura, Andalucía y parte de Murcia en España; en Francia también tienen mala fama los naturales del sur.


No hay que etiquetar a ningún lugar ni a nadie antes de conocerle. En el libro de la biografía de uno de los empresarios más importantes que haya tenido España don Eduardo Barreiros, escrita por Hugh Thomas, se comenta que el Sr. Barreiros, refiriéndose a la productividad y profesionalidad de sus 25.000 obreros, dijo que los más laboriosos de todos eran los andaluces y los extremeños. Pero ¿por qué era así?. Los andaluces en su tierra, en al años 1965, si tenían trabajo, ganaban un salario de unas 3.000 ptas al mes mientras que trabajando en Barreiros de montador en una cadena de producción sacaba unas 10.000 ptas. Se ha demostrado que cualquier obrero o empleado bien remunerado es un excelente trabajador mientras que si le dan una miseria de salario se convierte poco a poco en un tocagüevos.


En la actualidad, en Andalucía, el que tiene la mala suerte de tener un trabajo en precario suele ganar un salario asquerosamente malo: muchos trabajadores de ambos sexos no llegan ni a los 1.000 euros al mes. Con este aliciente lo normal es que estos obreros se toquen las ingles y cojan bajas laborales siempre que puedan  para equilibrar la humillación y el mal trato de sus empresarios abusones. 


Por desgracia, esta situación provoca una mala fama para Andalucía que se extiende por toda España y hace, si así fuera requerido, que las empresas industriales nacionales y multinacionales prefieran otras regiones para montar sus factorías.


Los nortes y los sures siempre existieron y el sambenito que tenemos los sureños es difícil de erradicar al menos que demostremos que somos competitivos y trabajadores y que no somos  unos tarambanas pensando siempre en el pescaíto frito y en la copa de manzanilla.

jueves, 26 de abril de 2012

Casi un Minicuento

A la caza de un Libro de Horas


En el año 1998 visitó mi galería de arte un antiguo compañero de trabajo. Tras los saludos me preguntó si yo entendía algo de libros antiguos. Le contesté que esa no era mi especialidad aunque si era capaz de distinguir un auténtico incunable de uno falso.


Tras cerrar el negocio llegamos a la casa de A.N. y me subió a una buhardilla agradablemente decorada que era donde él, me dijo, trabajaba en sus maquetas de barcos. Con misterio y tras hacerme prometer absoluta confidencialidad sacó de un arcón un libro envuelto en un lienzo y lo dejó sobre la mesa. Una vez libre de la envoltura lo contemplé. Era un bello ejemplar de un Libro de Horas, bastante bien ilustrado y con un estilo típico del siglo XV. No lo podía creer. ¿Cómo había llegado esa joya a las manos de A.N.?
Cuando lo vi con detenimiento noté que era una falsificación casi seguro realizada en el siglo XIX, cuando se puso de moda coleccionar antigüedades. Se lo dije. Por supuesto que no me creyó. Me contó que ese libro lo trajo de Francia un pariente republicano que luchó contra los alemanes en 1944 en Cambrán, que lo había encontrado entre las ruinas de un caserón.


Lo deseé y le ofrecí comprárselo. No me importaba si era una falsificación o si había sido traído a España de contrabando. Quedé prendidamente enamorado de aquel bello y ficticio Libro de Horas.

Religión

¿Existe una Iglesia Católica de izquierda?


En la era digital nadie es ignorante si así lo desea excepto los mentecatos que dicen que les produce dolor de cabeza el mero hecho de pensar.


Busqué en Internet frases, más que artículos, que aclararon la pregunta que hacemos.


"Pedro Casaldáliga ya recomendó que hay que humanizar a la humanidad para después hacer todo lo demás. Los cristianos católicos de izquierda siguiendo este principio que se considera como la prolongación de la acción de Dios en la historia reniegan toda institución que pretenda utilizar al ser humano como medio para conseguir otros fines".


También pude leer: "La pobreza crece en todo el mundo. Son personas y países que sufren, excluidos del don de la vida digna y sometidos por un sistema capitalista inhumano y por una sociedad que es cada vez más insensible ante tanto dolor"


"Jesús anunció de forma parcial y dialéctica el Reino de Dios que convirtió en Buena Noticia para los pobres económicos y sociales y en Mala Noticia para los ricos. Por eso se ha dicho y con razón, que los pobres son el privilegio hermaneútico que verifican la correcta práctica cristiana".


"Los colectivos católicos de izquierda se inspiraron también en el radicalismo de Jesús sobre la propiedad y en los ensayos socialistas de las primeras comunidades transmitidas en las cartas de San Pablo y en los Hechos de los Apóstoles"


"Es necesario en España y en toda Europa una alianza activa entre los cristianos progresistas y aquellos intelectuales agnósticos que, pese a carecer de fe religiosa son conscientes del papel fundamental del cristianismo en las raíces de nuestra cultura humanista y liberal"







Mi querida compañera de aventura a los pies de Sierra Nevada


Excursión en moto por las cumbres de Sierra Nevada

Todavía guardo en mi biblioteca una colección de mapas del ejército, escala 1/50.000, de los alrededores de Granada. Unos mapas que utilicé en mis correrías por bellas pistas a bordo de mi 4x4 o de mi moto enduro.


Antes de su prohibición, todos los veranos se abría la carretera asfaltada más alta de Europa que subía al Veleta (3.398 metros de altitud).
 Un poco antes de llegar a la cumbre se toma una pista de tierra que transcurre por la cuerda de los tres mil metros para salir por la Alpujarra. Esa magnífica travesía Granada-Veleta-Cauchiles y Alpujarra  la hice tres veces en coche y una vez en moto.
Desde Granada se pasa por Pino Genil, por la antigua carretera, comenzando el ascenso y pasando por el Balcón de Canales, Collado  de las Sabinas, Collado del Diablo, Albergue Universitario y subiendo incansablemente hasta notar que el motor se atraganta por falta de oxígeno.
Repito, hacer esta travesía en moto es una gozada: hay que ponerse en pie o casi sentado en el depósito para aligerar la rueda trasera. Curvas y más curvas, rampas increíbles en la zona de Piedras Resbaladizas (3.000 metros altitud), se llega al Veleta para hacer unas fotos y luego desciendo unos metros para coger el carril de tierra. Se nota que el agua del radiador de la moto barbotea y la bujía fría de platino va bien. Cerca de los Tajos de la Virgen, a 3.100 m. se pasa cerca de la laguna de Aguas Verdes y después de la laguna de Río Seco, todavía con témpanos de hielo flotando en pleno mes de agosto.
La pista es buena para una moto equipada con suspensiones Marzzoschi delantera y White Power en la trasera.


En el Mirador de Trevélez (2.800 m.) paré para echar un cigarrico. El silencio era abrumador. El pueblo parecía que estaba allí abajo al alcance de la mano. ¡Se veía tan cerca!
Arranco de nuevo y desciendo serpenteando, me cruzo con otro motorista que hacía la travesía a la inversa: desde Capileira a Granada.
 Cuando llegué a aquel pueblo serrano me comí un suculento plato alpujarreño con media botella de vino Costa. Me sentó tan bien que apenas noté el viaje de vuelta a Granada.  

Laguna de la Caldera en verano. Sierra Nevada